El consentimiento sexual es un acuerdo entre dos personas para tener sexo o participar en una práctica sexual en conjunto. El consentimiento nace de un sentimiento de motivación en donde debemos asegurarnos de recibir un sí seguro y certero, ya que si tu pareja acepta tener sexo contigo, pero transmite preocupación o inseguridad, atentx porque no hay consentimiento.
El consentimiento se debe dar sin presiones, sin engañar, forzar o amenazar a tu pareja para que diga que sí. Algo muy importante de resaltar es que ninguna persona puede dar su consentimiento si está inconsciente o en un estado mental alterado por drogas o alcohol.
Entendiendo el consentimiento sexual
Todas las personas que tengan una vida sexual activa tienen el derecho a elegir con quién tener sexo y con quién no. Ahí es donde inicia el consentimiento, en la comunicación, en los límites establecidos durante la relación sexual y en las preferencia sexuales.
Una vez que tengas claro qué es el consentimiento sexual, vayamos a ver cómo debe ser:
- Apasionado: Cuando quieres tener sexo o participar en una práctica sexual con una pareja.
- Recíproco: Cuando tu pareja también quiere tener sexo o participar en una práctica sexual contigo.
- Voluntario: Es cuando has decidido tener sexo o participar en una práctica sexual segura sin presión externa, expectativas o culpa. Estás consiente de lo que está pasando y tu juicio no está incapacitado por drogas o alcohol.
- Informado: Entiendes los términos y límites de tener sexo o participar en una práctica sexual. Si en algún momento los términos de la situación cambian, entonces tu consentimiento se invalida.
- Continuo: Acceder a participar en una práctica sexual no significa que aceptas repetirla en el futuro. El consentimiento es necesario para cada práctica específica.
Consentimiento primero, sexo después
La mejor manera de saber si cuentas con el consentimiento de una persona es preguntándole. La comunicación verbal y el lenguaje corporal son muy importantes al momento de obtener el consentimiento de tu pareja.
La comunicación es más fácil de lograr si conocemos bien a nuestra pareja, por tal motivo es muy importante prestar atención cuando estás con una nueva pareja. Antes de tener sexo, asegúrate de tener el consentimiento primero.
Aquí te damos algunos tips para lograr un consentimiento sexual informado y respetuoso:
1. Pide el consentimiento antes de tener sexo o participar en cualquier práctica:
No presumas lo que le gustará a tu nueva pareja, siempre es mejor preguntar en vez de asumir.
2. Asegúrate de tener el consentimiento de tu pareja durante la relación sexual:
Pregúntale si quiere continuar o sí deberías hacer algo diferente. También hazle saber a tu pareja que puedes parar en cualquier momento.
3. Presta atención a las señales no verbales de tu pareja:
Si tu pareja está distraída o callada y se muestra incómoda o molesta, detente y pregúntale si todo está bien antes de continuar.
4. No tengas sexo o participes en prácticas sexuales con personas en estados alterados de conciencia:
Las personas no pueden dar su consentimiento si se encuentran incapacitadas por el uso de drogas, alcohol o medicamentos.
5. Habla con tu pareja sobre posibles detonantes:
Si sabes que tu pareja ha tenido relaciones violentas o ha sufrido violencia sexual, habla con él/ella sobre la situación y muestra empatía. Esto ayudará para que ambos lleguen a un acuerdo y se dé el consentimiento sexual.
El consentimiento antes de tener sexo es una cuestión sobre comunicación y respeto hacia tu pareja. Así que la próxima vez que tengas sexo, asegúrate de que exista este acuerdo para tener relaciones sexuales seguras y placenteras.