Las zonas erógenas de nuestro cuerpo son muy variadas. No se limitan a nuestros genitales, el cuello, las nalgas o los senos femeninos. El sentido del tacto por nuestras piernas, brazos, cara, pecho u otros lugares también puede contribuir a que lleguemos al orgasmo. Las mujeres sobre todo son las que se atreven a explorar esto una vez que se deciden a explorar su sexualidad, pero ¿qué pasa con los hombres?
Muchos varones cometen el error de dar por hecho que solo su pene es el que puede hacerlos sentir placer o el ano en caso de que sean homosexuales. Esto limita por completo lo que ellos logran experimentar al momento del delicioso. Hay muchas partes de su cuerpo que pueden otorgarles excitación, las cuales no se limitan a una preferencia o rol sexual. Una de ellas que a muchos los puede volver locos cuando lo intentan, son los pezones masculinos.
El nipple play dice hola
¿Qué es esto de nipple play? Este concepto viene del inglés y literalmente significa “juego de los pezones”. Se practica con frecuencia por mujeres para estimular sus senos. No obstante, también los hombres pueden participar de él, ya sea con el tacto de otras personas, estimuladores o por sus propias manos. Además, en ellos esta zona en particular no tiene otra función más que la de otorgar placer.
Según la US National Library of Medicine and National Institutes of Health, el 52% de los hombres encuentran que la estimulación de estos chuponcitos causa o mejora su excitación sexual. Claro que hay algunos que simplemente pueden no sentir nada o ser tan sensibles que los incomode. Para poner en práctica el nipple play y descubrir lo que a ti o a tu pareja le gusta, hicimos la siguiente guía completa para que sea una experiencia muy placentera.
Ve lento y presiona ligeramente
Con la llema de tus dedos recorre de su ombligo hasta poner tus manos en su pecho. Tócalo a los alrededores poniendo hasta que pongas atención a sus pezones. Fíjate en cómo se siente, ¿le gusta o es demasiado para él? Si notas que le está agradando ahora puedes proceder a hacer movimientos suaves y circulares en ellos, haciendo un poco de presión. Sube de velocidad de poco en poco.
Lámelos y chúpalos
Las manos no es lo único que puede estimular, ahora es el turno de tu boca. Lámelos de arriba abajo, haz movimientos circulares con tu lengua lentamente. Luego, chúpalos haciendo un poco de succión. Observa sus reacciones y lo que está sintiendo. Ahora puedes atreverte a moderlos un poco para tener una sensación intensa, aunque cuidado, tampoco se trata de lastimar al menos que eso sea parte del juego.
Incorpora juguetes y otros elementos
Puedes agregar juguetes sexuales como el succionador de pezones para mejorar la experiencia. También, trata de utilizar una pluma para ver sus sensaciones o agregar crema, aceite de coco o estimuladores que potencien las zonas erógenas. Además, lo puedes combinar con algunos alimentos dulces como el helado, frutas, yogur o hasta chocolate.
Intenta algo más extremo
Si ya son experimentados en el nipple play, practican algo más rudo como el BDSM o simplemente quieren subir de tono las cosas, pueden intentar algo más extremo. Las pinzas para pezones pueden ser un auxiliar que potencie las sensaciones y ocasione un poco de dolor mezclado con placer en él. Si tiene perforaciones en los pezones, pueden aprovecharlo y jugar con ellas, jalarlas o poner las pinzas para tirar ligeramente de ellos. Además, también pueden pellizcar o morder con más fuerza.
Mézclalo con otras prácticas
Hay hombres que afirman poder llegar a sentir orgasmos con esta práctica, pero no es así en todos los casos. Por ello, es importante conocer qué nos gusta y comunicarlo. El nipple play puede juntarse con masturbación, penetración, frotar u otras prácticas. Si hay una zona erógena que puedes explotar, no significa que lo demás se cancela. Por ejemplo, frotar los pezones con una mano, mientras le jalas el ganzo puede ayudarlo a llegar al clímax de forma más placentera. También mezcla la boca y las manos, experimenta todo lo que puedas con él.
¿Y a ti cómo hombre te gusta el nipple play? ¿Te atreverías a experimentarlo?