La historia que nos contamos sobre lo que estamos viviendo dirige nuestras emociones, acciones y reacciones ante la vida, define quienes somos; en nuestro placer sexual pasa lo mismo
He escuchado expresiones como “estaba encima de el y lo único que pensaba era si estaba viendo mi panza o mis estrías” o “estaba por empezar y el es muy buen hombre pero no para la cama”. Estas dos situaciones (de muchas más por el estilo que he escuchado) reflejan que, tanto lo que nos estamos diciendo de nosotras mismas como de la otra persona definen que tanto estamos abiertas al placer propio sin importar nada más en ese momento; y es que como todo en la vida, la capacidad de estar presente dicta la calidad de la experiencia pero para las mujeres, a eso se le suma la historia, el significado.
Así que, la determinación de si fue un “buen polvo” para nosotras, aparte de los “básicos”, es todo lo que nos decimos acerca de lo que esa persona o situación significa, de lo que pensamos de nosotras mismas (¿estoy siendo muy p$#?) y nos cuesta entregarnos únicamente al placer físico. Por esto es que nuestro cerebro es como un órgano sexual, las conexiones asociadas al significado que hace del momento deciden si mandar señales de placer o no.
Asi que, ¿tu que historia te contas? ¿Te podes entregar al placer fisico sin estar en tu mente llena de juicios?
¿Te identificas, te suena familiar? ¡Cuéntanos en los comentarios!