Cuando conoces a una nueva persona y te sientes atraída física y sexualmente por ella es frecuente que experimentes nerviosismo y ansiedad sexual. La especialista en Terapia de Pareja, Carolina Muñoz, apunta que esto se da debido al propio deseo de agradar y la intención de querer satisfacer las expectativas de la otra persona en el ámbito de la intimidad.
La incertidumbre y el desconocimiento de las prácticas sexuales de una persona que acabamos de conocer hacen que experimentemos inseguridad o estrés durante las primeras relaciones sexuales.
Identificando la ansiedad sexual
La ansiedad durante el sexo es más común de lo que te imaginas; es un mecanismo de defensa que la mente crea para alertar al cuerpo ante un peligro. La ansiedad sexual se produce antes o durante la relación sexual y no permite disfrutar a las personas de su vida sexual.
Algunas personas desarrollan síntomas que les hacen perder el deseo sexual y perciben las relaciones sexuales como algo negativo o como un riesgo que los motiva a alejarse del sexo.
Síntomas
Los síntomas de la ansiedad se presentan en diferentes niveles y se pueden manifestar antes, después o durante las relaciones sexuales.
- Taquicardia
- Dificultad para respirar
- Mareos
- Sequedad bucal
- Dolor abdominal
- Hormigueo corporal
- Exceso de sudoración
- Contracturas musculares
- Pérdida del deseo sexual
Repercusiones en el sexo
La ansiedad que se experimenta por satisfacer a otra persona mantiene a quien está padeciendo los síntomas en un estado de vigilancia constante en donde no existe placer o satisfacción sexual.
En algunos casos los niveles de ansiedad sexual pueden aumentar limitando la capacidad de sentir y de excitarse. Si la excitación se pierde algunas disfunciones como pérdida de lubricación, dificultad para alcanzar el orgasmo y eyaculación precoz empiezan a manifestarse.
Consejos
- Olvídate de impresionar al otro y enfócate en disfrutar del momento.
- Plática con tu pareja y pregúntale que le gusta y que lo excita durante el sexo.
- Tómate tiempo para ti, conoce tu cuerpo y confía en tus habilidades en la cama.
- Disfruta de cada caricia y beso y concéntrate en lo que estás sintiendo.
- Acude al psicólogo si los síntomas permanecen.
Lo más importante al momento de tener un encuentro sexual es no marcarse metas ni objetivos, confiar en ti mismo y dejar que la relación sexual se desarrolle naturalmente. ¿Qué otro consejo agregarías para combatir este padecimiento? Déjalo en los comentarios.
Fuentes:
