El famoso punto G, anhelado por tantos y alcanzado por muy pocos y aunque no es forzoso tocarlo para disfrutar de una buena sesión de sexo, no está de más que te sepas algunos truquitos para poder tocarlo y enloquezcas a tu pareja. Toma nota, porque estas posturas sexuales te harán llegar a él rápidamente.
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Algunos secretitos
Antes de querer meter el dedo, el pene o algún juguete a tu pareja, es importante que sepas ciertas cosas. Pues el punto G podría resultar un poco tímido si no se estimulan otras partes del cuerpo. Aquí te van unos consejos:
- Conoce el punto G: Primero lo primero, ¿qué rayos es el punto G?. Muchos tienen la idea que es un parte independiente en la vagina y es un lugar místico al que no se puede llegar y lo cierto es que es parte del cuerpo interno del clítoris. Lo que se toca por afuera es tan solo la cabecita.
- No es fácil encontrar el punto G: No es sencillo decirte que metas los dedos y vas a encontrarlo, también es relevante mencionar que primero debes de estimular la cabecita del clítoris para que sea más fácil tocar este punto. Tampoco hay un mapa que diga que tanto debes meter los dedos para llegar a él, se requiere de una ardua exploración para saber que se ha llegado a él.
- Aplica la vieja confiable: Una vez la mujer esté excitada, te recomendamos que metas dos dedos y los muevas como si intentarás decir “ven aquí”, ejerce sólo cierta presión. Debido a que ya se ha estimulado la zona, será muy fácilmente que el punto G sea tocado.
Posturas sexuales
Ahora si, ya sabes que no es el punto G y descubriste cómo llegar con los dedos a él, es momento que des un paso más y lo toques con el pene o algún juguetito.
1. Por detrás
Las mejores posiciones para alcanzar el punto G se relacionan con las que se mete el pene por detrás, pues por la forma en la que se encaja el miembro, este va mucho más profundo y toca todas las paredes internas.
Estás son las que puedes hacer:
- El perrito: La mujer se pone en cuatro y el hombre la penetra por detrás, ella puede poner todo su pecho en la cama o él jalarla por las manos hacia atrás para tener un punto de apoyo.
- La cucharita remasterizada: Aquí deberán acostarse como si fueran a hacer una cucharita, la mujer flexionará sus piernas hacia su pecho y el hombre tendrá que penetrarla.
2. Con profundidad
Estas posturas están hechas para que el pene toque absolutamente todo y se adapta muy bien a los penes pequeños, si tu mástil es mucho más grande que el promedio debes tener cuidado o en lugar de estimular el punto G, terminarás lastimando a tu pareja.
La postura por excelencia es una con dos pequeñas variantes:
- Piernas arriba 1: La mujer se tiene que acostar y levantar sus piernas hacia arriba, el hombre podrá introducir su pene fácilmente.
- Piernas arriba 2: En esta, en lugar de que la mujer sostenga sus piernas en el aire, tiene que ponerla en los hombros de su pareja.
3. Para que ella te guie
Si la mujer se ha explorado lo suficiente, entonces sabe como llegar a su punto G, para estas posiciones ella será la responsable de que tu pene toque la zona indicada a través de sus movimientos.
Intenten probando estas dos posturas:
- El sacacorchos: El hombre se tiene que acostar boca arriba y juntar las piernas, la mujer se colocará a la altura del pene, pero en lugar de penetrarse en la misma dirección que él, tendrá que hacerlo de lado. Apoyando sus manos en el pecho y piernas de él para poder moverse.
- Vaquerita invertida: Con esta hay que tener cuidado dependiendo del tipo de pene que sea, si es curvo, entonces se deberá prestar atención hacia qué lado está doblado, el chiste es encajarlo como si se simularán los dedos del “ven aquí” como mencionamos anteriormente, con el resto de los penes no hay pierde.
Para hacerla, el hombre se debe recostar boca arriba y ella tendrá que penetrarse pero viendo hacia los pies de él, los movimientos aquí deben ser frotándose de arriba hacia abajo o haciendo círculos.
4. Colgada
Estas requieren que tengas una buena condición física, debido al esfuerzo que se realiza. Por ello las hemos separado, pero sirven también para que la mujer guíe el movimiento hacia su punto G.
Te compartimos la versión fácil y la difícil:
- La amazona: El hombre tiene que estar parado y la mujer se debe de colgar de sus hombros para meterse el pene, él se debe de encargar de sujetarla por las piernas y ella será la encargada de subir y bajar.
- En una silla: El hombre se sienta en una silla y ella se sienta encima de él, puede penetrarse viéndolo a la cara o dándole la espalda.
5. Pa los expertos
Si las demás posturas sexuales te parecen aburridas y quieres algo de otro nivel, entonces las siguientes son perfectas para ti. Se requiere mucha habilidad para lograrlas, ¿te atreves?
- El ventilador: La mujer debe recargar su mano derecha en alguna superficie y luego subir su pierna derecha, estirándola hacia atrás. El hombre debe posicionarse entre sus piernas y penetrarla.
- Pecho tierra: Ella se debe acostar boca abajo en el piso, luego él la tiene que levantar de las piernas y colocarlas alrededor de su cadera para después meter su pene.
Ya tienes muchas posturas para practicarlas en tu próximo encuentro sexual, aunque siempre debes recordar preguntarle a tu pareja si le gusta que le toquen el punto G, porque no todas las mujeres encuentran satisfactoria esta acción.
FUENTES:
Mi bebé y yo
El confidencial
