La sexualidad humana es tan variada y diversa que no es de sorprender que existan cada vez más clasificaciones. Cada persona vive de forma distinta sus preferencias sexuales, por lo que una sola forma de clasificar no define a todas las personas. Es por esto que la sexología crea más términos para identificar las distintas vivencias sexuales de los humanos. Sobre todo aquellos que son fluidos como es el caso de la antrosexualidad.
¿Antrosexualidad?
Sí, como lo leíste, antrosexualidad y ya chole con ese chiste de que te gustan también los antros, porque no es divertido, créenos. En fin, esta sexualidad se caracteriza por la falta de identificación con una orientación sexual en concreto. Existe una búsqueda de explorar y experimentar con la sexualidad del individuo, por lo que definirse o encasillarse en una orientación como heterosexual, homosexual u otra no es lo que define a aquellos con este tipo de preferencias
Las personas antrosexuales experimentan los vínculos de manera fluida, por ciertos periodos incluso hacia un grupo específico de personas. En algunas ocasiones pueden solo estar atraídos por hombres, en otras solo buscar mujeres, posiblemente también quieran tener exclusivamente vínculos con personas no binarias, entre otros casos. Sin embargo, es importante entender que esto es algo que en estas personas, es como el género fluido de las sexualidades, por hacer una comparación.
¿Entonces están confundidos?
No precisamente. Muchas personas sienten una confusión normal cuando están descubriendo su sexualidad, es algo común sobre todo en un mundo heteronormado que no educa para aceptar que no todos son heterosexuales. En el caso de los antrosexuales, más bien no tienen una sexualidad definida, pero eso es en sí su forma de vivir y experimentar su orientación sexual. Cabe destacar que sus vivencias son variables de forma genuina, no es un invento ni una etapa, ellos son así como tal.
Incluso, su experiencia es distinta de la pansexualidad y bisexualidad, ya que las personas con estas orientaciones sexuales sí tienen definido que sus gustos pueden ser mujeres, hombres y otros géneros. Por ejemplo, una persona bi o pan no deja de serlo por estar con una personas del sexo opuesto por años. En cambio, alguien antrosexual, puede que durante ese tiempo solo sienta atracción heterosexual y en unos años solo salga con personas de su mismo sexo.
Aceptémoslo, por más que nos encantaría que el mundo fuera simple, jamás lo será y eso precisamente es lo que hace la diversidad. Se vale no conocer o confundirse, pero es importante respetar la forma que los demás viven su sexualidad e identidad de género, sin suponer que todos hacen lo mismo o burlarse si escuchan una clasificación nueva. Mejor hay que aprender sobre nuevas vivencias y descubrir todo lo que el mundo nos tiene para sorprendernos.
¿Ya conocías la antrosexualidad? ¿Eres antrosexual o conoces a alguien?